Anecdotario juvenil. Mi experiencia COVID-19 Parte I

Que no iba a llegar a Tabasco, que el 2020 sería un año “normal” y que permanecer en casa sería fácil, fueron algunos pensamientos de jóvenes universitarios, que al oír del virus denominado COVID-19, no concibieron la magnitud de este evento de salud mundial.

El relato de José Esteban López Gómez, nos muestra un panorama general desde el inicio del año, con eventos multitudinarios y sus planes sobre el nuevo ciclo escolar como estudiante de la Licenciatura en Comunicación, “pero ¿quién pensaría que algo grande se aproximaba? Medios de comunicación, redes sociales y en todos lados se hablaba de un nuevo virus, conocido como COVID-19 o Coronavirus, está enfermedad estaba volviendo loco al mundo con el miedo de que cada día se esparciera más”, detalla.

La pandemia nos quitó muchas cosas, es la opinión de Francisco Javier Torres Flores, alumno de la División Académica de Educación y Artes, “en lo personal algo de lo que soy aficionado, es a los deportes, en especial el béisbol; nunca pensé que llegaría el momento donde el mundo deportivo se pararía, no ver a los Olmecas, al América, a mis Lakers, a mis Patriotas o a mis Yankees, pero ese momento, llegó”.

Mientras, desde su hogar, Laura Daniela Pinilla Peña, también estudiante de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, relata que la realidad es totalmente diferente a lo que uno suele suponer, cuando se enfrenta a nuevos acontecimientos; “pensé que soportaría unos cuantos días, pero las noticias, la familia, los comentarios, las redes sociales abrumaban mi mente, y aquí empezó lo mejor, lo que yo creo que es la esencia de la ‘cuarentena’; al principio lo tomé muy tranquila, con calma, como un descanso de toda la rutina”.

Con el paso de los días, Laura perdió la noción del tiempo, no sabía de días, salía poco y empezó a padecer insomnio, y con ello la depresión, por ver ese viaje programado a Colombia cancelado, “me perdí más de la cuenta y en realidad encontré muchos caminos para llegar a la calma y creo que en eso se basa todo mi aislamiento social preventivo, en encontrarme, sanar y saber controlar mis emociones”, platica la estudiante de la Licenciatura en Comunicación.

Al día de hoy, desde el punto de vista de Francisco Javier, algunas personas piensan que el coronavirus ya se fue, no acatan las medidas preventivas, como usar cubrebocas, gel antibacterial o tomar sana distancia, “siempre hay que rescatar lo bueno, y creo que este es el momento para cambiar nuestros hábitos y mentalidad”.

Hablar de sus días de distanciamiento, para José Esteban, es hacer una lista de actividades similares: clases a través del Aula Virtual UJAT, dormir, ver series, hacer tareas y comer, “honestamente jamás habría pensado que estaría en cuarentena, no poder salir, no visitar a nadie, evitar el contacto físico lo más posible; solo espero que algún día todos volvamos a estar juntos y convivir como solía ser antes de la pandemia, quedarnos en casa es de gran ayuda para todos, con la esperanza de que cuando nos volvamos reunir, no falte nadie”, concluyó.