En la UJAT tejen químicamente el zinc con el oxígeno para degradar contaminantes

El óxido zinc, ha sido ampliamente investigado por las propiedades únicas que posee como compuesto no tóxico, económico, de alta estabilidad térmica y estabilidad química a temperatura ambiente y que puede funcionar como un material que degrada contaminantes orgánicos.

Así lo destacó la profesora e investigadora de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), Laura Lorena Díaz Flores, al dar a conocer los alcances del proyecto de investigación “Análisis de las transformaciones de fase de ZnO obtenido por la técnica de hidrólisis forzada en forma de películas delgadas sobre sustratos transparentes”.

En entrevista para el programa UJATconCiencia, detalló que “a nivel nacional e internacional nosotros habíamos trabajado ya con fabricar o producir materiales que tuvieran una propiedad de degradar con la luz, los compuestos contaminantes de las aguas negras en cuerpos lagunares o cuerpos de agua que están en contacto con el ser humano”.

La docente de la División Académica de Ingeniería y Arquitectura (DAIA), refirió que “este proyecto de análisis de las transformaciones de fase y que además cuenta con financiamiento del CONACYT ha sido cien por ciento satisfactorio a nivel personal, profesional e institucional”.

“El proyecto ha generado varias vertientes, porque es un tejido, se va tejiendo el zinc con el oxígeno, todas esas características de la orientación química que da una estructura preferencial para que luego se tenga una forma geométrica definida, pues nos permite que tengamos que el óxido de zinc pueda funcionar como un material que degrada contaminantes orgánicos simplemente con exponerlo a la luz del sol”, indicó.

Respecto a la generación de conocimientos que han derivado de esta investigación, Díaz Flores, dio a conocer que sirven de base para la formación de estudiantes como Antonia del Rocío López Guemez y Claudio Martínez Pacheco, quienes cursan los doctorados en Ciencias en Química Aplicada y en Ciencias en Ingeniería, respectivamente.

Destacó que “se ha encontrado conocimiento, generado ese conocimiento, lo estamos aplicando y lo más importante, estamos creando los cuadros profesionales que ya están insertos en la sociedad con todos sus conocimientos para servir con un buen fin”.

Para concluir, la doctora en Ciencias de los Materiales dio a conocer que, en los últimos años, el dióxido zinc se está utilizando en forma de película delgada para dispositivos optoelectrónicos, piezoeléctrico, películas delgadas conductoras transparentes y sensores, por lo que todas estas aplicaciones de nanotecnología, se deben a sus amplias y alcanzables morfologías con las que pueden alterarse o modificarse las propiedades eléctricas.