Un vigilante de la Constitución no debe valorar políticas públicas: Gutiérrez Ortiz Mena

Un vigilante de la Constitución no debe valorar políticas públicas, su función es asegurar que la democracia funcione y velar por el cumplimiento de las normas, refirió el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJ), Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, al disertar la Conferencia Magistral “La Suprema Corte y la Democracia en México”, la cual fue moderada por el rector de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), Guillermo Narváez Osorio. 

El Maestro en Derecho por la Universidad de Harvard, abordó ante estudiantes, juristas y servidores públicos de la entidad, tópicos como cuál es la función de la SCJ, cómo debe ser interpretada la Constitución Política y en qué organismo debe recaer el cuidado del cumplimiento de la misma.

En este sentido, indicó que la vida democrática de un país se debe dar dentro de un marco constitucional, por lo que la vigilancia de la Constitución no debe ser encargada al ejecutivo federal o al Poder Legislativo, ya que ellos tienen “la espada” y la “bolsa” y determinan las políticas públicas. 

“Si a estos dos no se les debe encomendar el cumplimiento de la Constitución, entonces nos queda el Poder Judicial, no tiene el ejercicio de la fuerza pública, no se mete en la política, no aprueba presupuesto, sus once servidores públicos no son electos democráticamente, su función es aplicar la ley a casos concretos”, detalló.

Gutiérrez Ortiz Mena, aseguró que quien tiene la capacidad para proteger los textos jurídicos son los jueces, ya que el Poder Judicial tiene la deliberación, y detalló que “la legitimidad de este poder no está en la democracia, sino se encuentra en la fuerza de sus razonamientos, la capacidad de deliberar y de razonar y ahí reside su legitimación”.

Agregó que el Poder Judicial solo se debe preguntar si la política pública es constitucional o inconstitucional y ahí termina su tarea, porque no goza de una legitimada democrática, por lo que sus fallos son garantizados con el respaldo de los otros poderes y la sociedad en su conjunto.

“La constitución es una norma que se debe interpretar objetivamente sin preferencias políticas o personales, a la luz de sus fines y garantizar que se realicen”, concluyó, para luego recibir de manos del rector Guillermo Narváez Osorio y de la directora de la DACSyH, Felipa Sánchez Pérez, una constancia por su aportación a la comunidad de esta casa de estudios.